lunes, 27 de octubre de 2008

De la quemación de los trabajadores, los riesgos de trabajo y los creativos.

Bueno, últimamente no he tenido nada que escribir, no por falta de inspiración sino de tiempo. Me he percatada de que mi agobiez natural ha ido en incremento. Por una parte me asusta un poco porque hoy leí en un periódico de circulación gratuita en cada semáforo, que el 60% de los trabajadores del país sufren de "Quemación".

Este padecimiento se caracteriza por baja en la productividad, continuos dolores de cabeza, malhumoraciones, enfermedades sin causa aparente, baja en las horas de sueño y otros tantos síntomas que aquejan a esta fuerza laboral tan desgastada.

Ahora, me impresionó las profesiones que padecen este síndrome en mayor proporción. Entre ellos figuran cirujanos, médicos de urgencias, enfermeras, psiquiatras y le siguen ¿los profesores de educación física?

Bueno, eso no fue lo que más me impresionó, según los datos del H. IMSS, los policías y servidores públicos son los que han incrementado exponencialmente la presencia de este padecimiento. ¿Es en serio? me pregunté. Qué tanto puede causarles stress a los servidores públicos llegar todos los días a San Lázaro y levantar la mano cuando están dormidos o a los policias (de los malos) buscar a un pobre diablo para sacarle una mordida.

Y no es que dude de los datos estadísticos de esta insitución caracterizada por el servicio, pero ¿dónde dejan a los publicistas? (no encontré un término mejor para lo que muchos de nosotros hacemos).

Sin generalizar, en mi caso muy particular, últimamente sufro de "quemación". Padezco estos dolores, agotamiento, molestia, muy mal humor por supuesto. Sé que muchos de ustedes también sufren de este trastorno y parece que a los "empleadores" les parece una falta de responsabilidad, compromiso o simplemente un exceso de quejas infundadas.

Si en realidad estos grandes reyes de la publicidad desean que la profesión a la que pertenecemos genere ideas que trasciendan fronteras y pensamientos, deberían pensar que en realidad nos están "quemando" en exceso.

Sólo puedo decir que si seguimos así.....estamos fritos.

miércoles, 8 de octubre de 2008

Del aniversario, el primer balance y el incierto futuro.

Este post, aunque nostálgico, mantiene su naturaleza concómica. Hoy, 8 de octubre de 2008, se cumplen 365 días de comenzar un sueño, de ver una salida, de anhelar un futuro.

8760 minutos han transcurrido desde que puse un pie en este lugar, cansado de las amenazas de una provincia muy lejana. Cuando crucé la entrada me acompañaban muchos sentimientos encontrados...miedo, confusión, deseo, incertidumbre pero también alegría, entusiasmo, hambre y mucho pero mucho coraje para conseguir mis objetivos.

Durante 66.66% del tiempo me sentí feliz, mi hambre se saciaba, mis objetivos poco a poco parecían materializarse y así fue. Cuando un viejo conocido llegó a esta provincia, todo cambió...y para bien.

Se me concedió (con trabajo de por medio) un lugar importante y no hablo de una imposición jerárquica, sino de un reconocimiento mucho más valioso, un respeto y un espacio para expresar.

Sin embargo, esta felicidad duró poco. Mi forma de expresarme era poco política e incomodaba a la persona que observó ese potencial escondido en mí. En consecuencia, mis "privilegios" desaparecieron repentinamente.

Después de impuestos y otras tantas deducciones legales, el balance arrojó datos sorprendentes y angustiantes: lo que parecía un año con grandes utilidades terminó en números rojos, en pérdidas, en riesgos.

Ahora me percibo como un perdedor, no por perder la condescencia y el respeto, sino porque no supe aprovechar las oportunidades y el espacio para hacer resonar mi voz y despertar la misma ambición y coraje en otros...la misma que traje conmigo hace 525, 600 segundos.

Y debo decirlo, todas las ganas, todo el deseo, toda la ambición comienza a apagarse. Pero buscaré de nuevo a mi musa, la que me ayude a conseguir nuevos triunfos, nuevos horizontes, porque no quiero perder este entusiasmo por lo que me encanta hacer de mi vida.

El balance es negativo, definitivamente. Números rojos, pero áreas de oportunidad.

miércoles, 1 de octubre de 2008

Del 2 de octubre, las amenazas y los tehuacanazos.

Para variar un poco la forma en la que su servidor se comunica con sus lectores, he de ocuparme de evitar juicios de valor y acusaciones (infundadas o no).

Hoy se me acusó. En mi escritorio apareció una orden judicial que me obligaba a presentarme en un juicio en mi contra. Las razón fue confusa: falta de cooperación y comportamiento subversivo.

Como saben, si algo me caracteriza es esa forma algunas veces "inadecuada" de reaccionar frente a situaciones que me molestan en demasía... y naturalmente eso fue justamente lo que hice. Pero hoy las autoridades no se tocaron el corazón y no hubo permisiones.

Me abordaron en el camino, cubrieron mi cabeza con una tela y me llevaron a un lugar lejano y oscuro. Cuando desperté, estaba inmerso en una escena de aquel 2 de Octubre de 1968, amenazado y subyugado por una autoridad represora, que se esconde en lo ilícito y que al mismo tiempo proclama libertad y soberanía.

Me preguntaron - ¿Quieres cooperar con nosotros? -. Con dificultad pude responder - NO -. Instintivamente el agente con iniciales P.E.Z. me tomó con violencia y me sumergió en un gran tambo de agua. Cuando lo creía necesario, me sacaba y repetía la pregunta.

Ante mi negativa constante, este agente trató de negociar con promesas e incluso me hizo una oferta difícil de rechazar. Sin embargo, mi espíritu viviría antes de contradecir mis convicciones.

Después de una golpiza rotunda acompañada de una serie de insultos bastante bien acoplados, me dejaron ir. Mis piernas temblaban, no de miedo, sino de dolor. Tras mis pasos tambaleantes, escuché una última amenaza:

"O te ajustas a las reglas o desapareces para siempre"

Digno homenaje al 2 de octubre.